• Conectado / Relacionado a otras/os | Oración Preparatoria

    Con el objeto de estar realmente presente en la sesión de oración de hoy, tomemos unos momentos para prepararnos. Esto requiere alcanzar la quietud, en forma literal y figurativa.

    Primero, encuentra un buen lugar para orar. Si estás confinada/o en tu habitación, no tienes elección. Pero recuerda, la oración se trata de una conexión real, y no de percibir una perfección. Por lo que encuentra el mejor lugar que puedas.

    Segundo, toma contacto con lo que necesitas para ser llevado a la quietud. Podrías pensar en tres lugares: tu cabeza, tu corazón y tu cuerpo.
    Observa lo que sucede dentro de tu cabeza. ¿Qué es lo que piensas hoy y en qué se diferencia de lo que pensabas ayer? Que no te atrape ningún pensamiento en particular. Sólo observa cómo son tus pensamientos.
    Observa lo que sucede dentro de tu corazón. ¿Que es lo que sientes hoy día, y cómo eso es único para éste día? Nuevamente, no quedes atrapado en ningún sentimiento, Sólo obsérvalos a todos.
    Observa lo que sucede en tu cuerpo. ¿Cómo se siente hoy y se sentía ayer? Observa las sensaciones que tiene: conformidad, desconformidad, dolor, cansancio, inquietud.
    Ahora observa tu respiración. Quizás hoy tienes dificultad para respirar. Si es así, no te alarmes y respira lo mejor que puedas. Mientras lo haces, reconoce que cada respiración, aunque sea difícil, es un signo del regalo de la vida en tu interior. Agradece a Dios por éste regalo.

    Mientras estás sentado, respirando y agradeciendo a Dios, permite a tu cuerpo que se vuelva pesado. Permite que una sensación de quietud te llegue. Esto puede tomar unos minutos. Guarda esta sensación hasta que te sientas preparado para proceder con nuestra sesión de oración para el día de hoy.

  • Tema de Oración: Conectado / Relacionado con otras/os

    Un hombre estaba en la tienda cercana y cuando llegó a pagar, el cajero le preguntó si quería usar la función inalámbrica en la máquina para tarjeta de débito. Esto quería decir que simplemente le mostraba su tarjeta a la máquina, lo suficientemente cerca para ser leída y para sacarle la plata de su cuenta. ¡Nada de meter la tarjeta en la máquina, nada de poner la clave, ninguna probabilidad de equivocarse. ¡Fácil! Dijo adiós y se fue.

    Mientras caminaba desde la tienda, sin embargo, se empezó a intranquilizar en su espíritu. Contempló esa experiencia durante los días siguientes y llegó a comprender por qué se había intranquilizado. Es por esto: la sociedad y la tecnología a veces nos mueve a la presunción de ningún contacto con los otros – una “sociedad sin contacto” si lo deseas. Las vidas pueden vivirse cada vez más remotamente, gracias en parte a las redes sociales y a los avance en la tecnología del computador.  Las amistades se encuentran, desarrolla y a veces también se terminan en realidad virtual sin que la gente se reúna de hecho. 

    Pareciera que nos estamos moviendo más y más hacia una sociedad sin contactos, donde nuestra propia existencia y necesidades propias son la primera importancia, y conseguir estas necesidades se puede hacer sin contactar a ningún ser humano viviente. No solo eso, el menor contacto con otros, también quiere decir menos perspicacia para ver las necesidades de los otros, y en esa situación los otros sufren y estamos privados de la experiencia de desarrollar empatía y de ayudar a nuestros pares humanos. Nuestro direccionar hacia una sociedad sin contactos nos privará de muchas cosas, nada menos que de la riqueza que viene del contacto, algunas veces desorganizado, cara a cara con otro ser humano.

  • Escritura

    Lucas 24:13-35  Entonces sus ojos se abrieron y lo reconocieron y él desapareció de sus vistas. Se preguntaron entre ellos, “¿No ardía nuestro corazón dentro de nosotros mientras nos hablaba en el camino y nos explicaba las Escrituras?”

    Mateo 28:16-20  Estoy con ustedes todos los días hasta el fin del tiempo.

    Efesios 3:14-21  Que Cristo Jesús los fortalezca internamente a través del poder del Espíritu.

  • Reflexión

    1. ¿Cómo podríamos crear una sociedad segura y “más conectada”?

    2. ¿Cómo podrías desarrollar más oportunidades para estar con, aprender de y ayudar a otros?

    3. ¿Cómo podrías ayudar a otros que ya están en un mundo “no conectado” y alcanzarlos con amor donde sea, cuando sea y de cualquier manera posible?

  • Oración Final

    Señor Dios Padre, te doy gracias por este tiempo de oración que he realizado, unido a otros que están orando en este día.
    Estoy también unido al Sagrado Corazón de Jesús, ardiendo con amor por toda la creación. En esta unión me encuentro, uno de muchos y uno de tus hijos amados.

    Ruego por la continua ayuda de tu Espíritu Santo, mientras termino éste tiempo de oración para volver a mis ocupaciones de este día.
    Ayúdame a guardar las lecciones que necesito, de éste tiempo de oración. Ayúdame además a dejar atrás todo lo que no necesito llevar.

    Sobretodo, ayúdame a estar consciente que estoy conectado a tí todo el tiempo, y que solo necesito hacer una pausa, respirar y orar, para estar profundamente consciente de esto.

Inicio